Cuando sientes realmente que quieres estar para siempre junto a esa persona que amas tanto, cualquier detalle es poco para el día de tu boda, ¿verdad?, sobre todo cuando se trata de decorar el lugar donde vas a celebrar tu enlace. Y es que ideas hay muchas, pero una que siempre queda muy bien es la decoración con pétalos de flores sobre alfombras.
Imagínate!, toda la gente agolpada en la puerta de la iglesia, el fotógrafo, amigos y familiares con los móviles listos para inmortalizar el momento en el que la novia sale del coche, donde algunos de los invitados incluso ya dan primicia con las primeras fotos que suben a Facebook, -vamos que hacen casi un streaming direct del evento-.
Pero mientras tanto, el novio no deja de mirar desde el altar hacia la puerta de entrada de la iglesia junto a su madrina. Todo está dispuesto y el padrino sale del coche para abrirle la puerta a su hija, todo el mundo está expectante y jubiloso.
Llega el momento más deseado, la novia sale del coche, con ese vestido nupcial impactante, padre e hija sonríen a todo el mundo y evidentemente se hacen querer por la cámara, como si fuesen famosos de la alfombra roja en un certamen de cine, todos vitorean, ¡viva la novia!. Un caminar pausado y suave sobre pétalos de rosas y comienza a hacer su entrada en el pórtico de la iglesia tras subir la escalinata, no cesan las fotografías, pero ¡qué nervios!, por dios!, haciendo el recorrido con su padre orgulloso, sonrientes los dos, con aparente serenidad, pero a la vez con esos nervios contenidos deseando que todo salga bien y sin ningún contratiempo.
¡Uff!, un leve resoplido sale de los labios de la novia al llegar al altar y se encuentran los novios por fin. Miradas cómplices entre ellos y el novio le dice a la novia, ¿te sabes el texto que teníamos pensado decirnos?, -ella mira a él haciendo que sus ojos se dilaten-, ¡hay dios mío!, -no me digas que se te ha olvidado…-. Pero, ¿llevarás la chuleta, no?. Él asiente con la cabeza, y en ese momento el párroco da comienzo a la ceremonia.
Obviamente situaciones así y muchas más se dan en este tipo de aptos nupciales, es lógico, teniendo en cuenta la puesta en escena. Existen bodas con menos protocolo y aún así seguirán suscitando momentos de nervios y de cierta ansiedad por aquello que con tanto cuidado y esmero se ha puesto par que todo salga bien.
Pero es normal que algún detalle se pueda escapar, y no pasa nada, porque todo el mundo está inmerso en un conjunto de situaciones, decorados, entretenidos con sus móviles haciendo fotos y un sin fin de cosas que al final queda todo resumido en un día memorable, lleno de color y alegría.
Por consiguiente si has pensado en hacer una boda muy elaborada y con cierto toque protocolario, te recomendamos que la organices incluyendo una corte nupcial, digamos que muchas parejas quieren que familiares y amigos íntimos los acompañen con un papel activo en la boda y encuentran en el cortejo nupcial la tradición perfecta para llevar a cabo la ceremonia rodeados del amor de las personas que más quieren. Normalmente delante de la novia van los pajes; luego las damas, seguidas por el niño y la niña que llevan los anillos, les siguen a continuación la dama de honor, luego las niñas con los pétalos de rosa y por último entra la novia tomada del brazo derecho del padrino.
De otra parte, la entrada del cortejo es uno de los momentos más especiales de la unión matrimonial y es cada vez más habitual adornarlo con moquetas económicas, que se suelen encontrar en tiendas especializadas para eventos y que aportan un gran colorido y a la vez magnifican dicho momento. Este tipo de moquetas se venden en anchos de un metro y se colocan a lo largo del pasillo de la iglesia y en la puerta de entrada a la iglesia o escalinata.
Muchos de vosotros os preguntaréis, ¿cómo se puede colocar una moqueta siguiendo la forma de los peldaños sin que pierda la forma?, pues muy sencillo, cuando compréis la moqueta para vuestra boda, pedid también cinta de doble cara autoadhesiva, que os ayudará a fijarla sobre cada escalón, luego se puede retirar fácilmente con una espátula.
Otro aspecto a considerar si os decantáis por la compra de una moqueta, es que si la vais a colocar en un salón de bodas en su interior, aseguraos de que dicha moqueta sea ignífuga, ya que en el banquete es posible que alguien pueda fumar y pueda provocar alguna quemadura sobre la moqueta o algo peor.
Una vez tengáis vuestra moqueta y para complementarla con adornos florales exquisitos y diferentes, podréis comprar pétalos de rosas aromatizados para vuestra boda, siendo una idea muy original por ser un símbolo de belleza, y que por cierto! , gracias a que están impregnados con un perfume intenso y que desprenden un agradable y duradero aroma a rosas, causarán sensación. En combinación con cestas decorativas para llevar las damas de honor y los pajes, crean un ambiente muy vistoso, sobre todo si se esparcen sobre la moqueta nupcial.
Otra idea muy vistosa y que no puede faltar en vuestra boda es la de colocar en cada ciertos tramos del pasillo de la iglesia un ramillete de flores o bouquet, que haga juego con el color de la alfombra y al mismo tiempo con los pétalos de rosa perfumados.
Incluso si os apetece, se pueden colgar guirnaldas de flores que bien pueden ser naturales si la ceremonia se hace al aire libre, o artificiales, si ésta se celebra en el interior de la iglesia, aunque es bastante indiferente, la verdad, porque a día de hoy las flores artificiales para bodas son tan parecidas a las naturales que casi ni se diferencian.